Manual de Filosofía Política II: El Estado

Centrábamos la entrega anterior a definir la filosofía política y a exponer uno de sus debates fundamentales. Ahora nos dedicaremos a uno de sus principales sujetos de estudio: el Estado o sistema político.

Como exponíamos antes, la filosofía política busca la manera en la que los seres humanos puedan convivir todos juntos sin estar en constante derramamiento de sangre. Sin embargo, vale hacerse la siguiente pregunta ¿Por qué convivimos? ¿Cuándo decidieron agruparse los seres humanos?

Dentro del campo de la filosofía política existen dos grandes teorías por las cuales los seres humanos coexisten. La primera, expuesta por Aristóteles en La Política, dice que nuestra naturaleza es esencialmente cooperativa y sociable. De ahí la tan manida frase que diagnostica al hombre como un zoon politikon, un animal político.

Para el pensador, los hombres que viven en aislamiento de sus semejantes son rebeldes a su propia naturaleza. Los ermitaños y lobos solitarios son desviaciones contra natura que no son capaces de integrarse en el seno de la sociedad.

La segunda, propuesta por los pensadores de la edad moderna como Hobbes y Locke, refuta este punto. Para los primeros liberales, el ser humano vivía en un estado salvaje, sanguinario y violento, donde cada cual solo velaba por si mismo.

Primaba la ley del más fuerte sin cortapisas, era una cuestión de ganar o morir. Sin embargo, mantienen, en algún momento ese estado de naturaleza fue abandonado por las mismas razones que en teoría lo impusieron. Trabajar juntos era la única manera de sobrevivir. La paz se convirtió entonces en el bien más preciado, por lo cual debíamos abandonar nuestra naturaleza violenta.

En el estado de naturaleza, el hombre es un lobo para el hombre.

Los orígenes de la política y el Estado.

Ya fuere por su esencia colaborativa o por salvar el cuello, los hombres decidieron entonces agruparse. En primer lugar, relata Vico (y luego Engels), lo hicieron a través de la familia, nacida de la unión de dos individuos. Posteriormente, distintas familias buscaron convivir juntos para maximizar sus oportunidades. En este momento fundacional, surge la primera sociedad.

Figurativamente, este es el génesis de la política. Cuando las personas se agrupan deben tomar decisiones en conjunto, que competen a todos los integrantes del recién formado pacto. Llamamos política al proceso por el cual esto sucede, por el cual la gente resuelve los problemas que afectan a todos.

Sin embargo, este proceso necesita de una metodología. Para ponerlo en marcha es esencial poder responder cuestiones como ¿De que manera podemos tomar una decisión conjunta? ¿Qué pasa si no hay acuerdo? ¿Quién tiene la última palabra? ¿Si alguien atenta contra el pacto, quién o cómo se define su castigo?

Para zanjar esas cuestiones se desarrollaron esos sistemas de convivencia de los que tanto hemos expuesto. El sistema político se convierte entonces en el mecanismo por el cual se puede ejercer política, esto es, tomar decisiones colectivas. Hoy en día es lo que conocemos como el Estado.

El método en sí, sin embargo, variará mucho entre las distintas sociedades. En algunos casos se designará a una sola persona como garante del pacto, fundamentando su poder en lo divino o en la voluntad general del grupo. Esto daría paso a las primeras formas de cacicazgo y monarquía. El gobierno de uno por el bien de los muchos.

En otros, el poder (al que dedicaremos la próxima entrega) lo mantendrán una serie de representantes, un grupo de personas que serán elegidas por el grupo para conducir sus asuntos. Este es el origen de las primeras repúblicas.

Cada sociedad desarrollaría un modelo que derivó en las distintas formas de gobierno.

La filosofía política y el Estado.

La disciplina, entonces, estudiará todos nuestros modelos de convivencia e intentará desarrollar una forma libre de fallas y conflictos. Casi todos los pensadores políticos plantearán uno: Platón en La República, Hobbes en El Leviatán o Tomás Moro en Utopía son algunos de estos.

Junto al poder y su fundamentación, el Estado se convierte en el sujeto central de estudio de la filosofía política. Esfuerzo que se prueba necesario puesto que aún hoy, miles de años después de aquella primera y decisiva agrupación humana, buscamos la mejor manera de vivir juntos y en paz.

Bibliografía

  • Bobbio, N. (2005) Teoría General de la Política. Trotta: España.
  • Bobbio, N. (1999) Estado Gobierno y Sociedad. FCE: México.
  • Cropsey & Strauss (Compiladores) (2004) Historia de la Filosofía Política. FCE: México.
  • Platón (2006) La república. Alianza: Madrid.
  • Aristóteles (2010) La Política. Alianza: Madrid
  • Hobbes, T. (1681) Behemoth. Recuperado de: http://lf-oll.s3.amazonaws.com/titles/770/Hobbes_0051-06_EBk_v6.0.pdf
  • Hobbes, T. (2010) Del Ciudadano y Leviatán. Técnos: Madrid.
  • Ponton, G & Gill, P. (1993) Introduction to Politics. 3era Ed. Blackwell: Estados Unidos.

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