La tensión aumenta
Después de que Corea del Norte proyectara un misil transcontinental nuevo y se declarase»Estado nuclear», Estados Unidos y Corea del Sur afianzan sus lazos militares desplegando las maniobras aéreas de mayor calibre jamás realizadas conjuntamente por parte de estos dos países.
Se trata de operaciones masivas que involucran la participación de cazas F-22 y F-35 destinadas a mejorar la capacidad de maniobra y de coordinación. Estas acciones, entre otras cosas, simulan ataques aéreos contra objetivos norcoreanos como plataformas de lanzamiento de proyectiles autopropulsados o emplazamientos nucleares. El entrenamiento también está dirigido a optimizar la capacidad de respuesta frente a ofensivas rivales.
Corea del Norte, por su parte, considera estas maniobras como un ensayo de invasión a su país, de modo que responde también con simulacros con misiles balísticos.
