El mundo de los sueños es misterioso, y a menudo genera expectación. Existe mucha literatura al respecto, y los avances científicos han venido a dar explicación a ciertos fenómenos.
El campo de la neurociencia, encargado de investigar las conexiones cerebrales y su funcionamiento, explica los tipos de sueños y de trastornos que existen durante las diferentes fases.
Las pesadillas, por su parte, son un tipo de ensueño que suele generar una fuerte respuesta emocional. Sensaciones como miedo, terror, e incluso depresión y ansiedad son experimentadas por el individuo que ha vivido una pesadilla.
Suele suceder que quien experimenta una pesadilla, tarda un tiempo determinado en volver a conciliar el sueño.
Existen múltiples causas por las que puede vivirse esta situación durante el sueño. Entre ellas causas físicas, como la fiebre; o fisiológicas, como una etapa de estrés y ansiedad. El consumo de drogas alucinógenas también propicia la aparición de este tipo de sueños.
A menudo aparecen en la fase REM del sueño, y suele ser más común durante la infancia. Es importante no confundirlo con los llamados Terrores Nocturnos, un tipo de trastorno que afecta a un número mucho menor de personas.
La psicología se ha encargado de intentar dar explicación a los sueños, a través de interpretaciones más o menos realistas.
A continuación, las cinco pesadillas más frecuentes y las interpretaciones más comunes que se conocen de ellas.
1. ENCONTRARSE DESNUDO EN PÚBLICO
Durante el sueño puedes estar en cualquier ubicación, más o menos conocida. Puede ser tu lugar de trabajo o estudio, o un bar que no te resulte familiar. Y, de pronto, sientes que tu ropa no está dónde debería.
Frecuentemente este tipo de sueños suele relacionarse con la necesidad de aceptación de quien lo sufre. Bien sea por un grupo, o por un individuo en concreto. Suele significar que se está preocupado por encajar en un nuevo entorno que aún no se domina.
2. SENTIRSE PERSEGUIDO
Es una de las pesadillas más comunes documentadas. La persona que la sufre intenta escapar de algo o alguien, pero cuanto más esfuerzo pone en ello, más imposible resulta. O bien se queda atrapado, o la velocidad que alcanza es menor que la del persecutor.
Existe un vínculo entre este tipo de sueños y las situaciones personales que están aún por resolver. Cuando se sueña que se es perseguido, es importante prestar atención al control que se tiene sobre la propia vida, y ponerle remedio en caso de ser necesario.
3. CAER AL VACÍO
La persona que tiene este tipo de sueño puede sentir que se cae desde una gran altura, como un edificio, o de la propia cama. Tropezar mientras se camina y acabar cayendo por un agujero es otra posibilidad.
Soñar con caer al vacío suele tener relación con situaciones de estrés o ansiedad, quizá ante una toma de decisiones importante que se aproxima, o cualquier circunstancia que esté próxima a solucionarse.
4. INTENTAR GRITAR Y NO TENER VOZ
Normalmente, cuando se sueña que no se es capaz de controlar la voz, se hace en momento de terror o auxilio. La persona que está soñando se encuentra en peligro o atemorizada, e intenta gritar para pedir ayuda, aunque no emite ningún tipo de sonido.
Este tipo de pesadilla puede vincularse con etapas vitales o momentos concretos de cierta impotencia. Cuando la persona siente que no puede controlar la situación que se aproxima, puede materializarlo en este tipo de sueños.
5. SENTIR ALGÚN TIPO DE DOLOR
En este tipo de pesadillas no tiene porqué ser la propia persona la que está siendo agredida, sino que simplemente lo presencie. Puede ser un dolor físico, o un dolor emocional. Suele ser común que el dolor padecido provenga de un animal o ente difícilmente controlable por la persona que está soñando.
La interpretación de este tipo de sueños suele girar en torno a la desprotección de quien los sufre. La persona puede estar pasando por una etapa de vulnerabilidad, y lo transforma en algo tangible a través de la pesadilla.
(*) Todas las imágenes de este post pertenecen al diseñador gráfico Brandon Kidwell.