Existen vidas monótonas y rutinarias, aunque no por ello sin trascendencia histórica. Sea como fuere, este no es el caso de la trepidante biografía de Jack Churchill.
John Malcolm Thorpe Fleming Churchill, también llamado “Mad Jack” o “Fighting Jack Churchill”, fue un teniente coronel de la Armada Británica recordado por su arco y su espada en plena Segunda Guerra Mundial. Pocas figuras de la historia militar reciente han tenido tanta personalidad, y menos son los que no necesitan del romanticismo literario para causar impresión en los que se aproximan a su trayectoria.
El “loco Jack” fue un personaje muy pintoresco. Los elementos más destacados asociados a Jack son la espada, el arco y la gaita. Pero sin adelantarnos en el curso de los acontecimientos, tenemos que empezar situándonos en Colombo, puesto que fue en esta ciudad de Sri Lanka donde nuestro “héroe de película” nació allá por el año 1906, cuando todavía era la Ceilán británica. Su padre, Alec Fleming Churchill, fue destinado ahí como ingeniero de distrito en el Servició Civil de Celián (Ceylon Civil Service). Sin embargo, la familia no tardó en volver al condado inglés de Surrey, para volverse a irse en 1910 a Hong Kong donde su padre ejerció de director de obras públicas y formó parte del Consejo Ejecutivo de Hong Kong. Como puede comprobarse, incluso los momentos más tempranos de su vida fueron inusuales y ajetreados. Jack nació en Colombo y sus hermanos en Surrey y Hong Kong.
No fue hasta 1917 cando la familia retornó a Inglaterra. Con apenas poco más de diez años, el joven Jack ya había recorrido medio mundo. Posteriormente, asistió al King William’s College y en 1926 se graduó en la Royal Military College en Sandhurst. Jack, siendo un novato, volvió a trasladarse, esta vez a Birmania. ¡Había un imperio que mantener! Estuvo allí destinado con el regimiento de infantería de línea de Manchester.
En 1930 empezó una insurrección nacional contra el gobierno en la Birmania británica. La rebelión se prolongó durante dos años. Finalmente, los ingleses consiguieron aplastar la revuelta. A pesar de que las cifras son de difícil comprobación, cerca de mil rebeldes murieron y nueve mil más fueron capturados. Muchos líderes como Saya San fueron ejecutados. Esta rebelión, también conocida como la “Rebelión de Saya San” representa uno de los movimientos anticoloniales del Sudeste Asiático. Fue esta la primera ocasión en la que Jack mostró su audacia y arrojo, hasta el punto de merecer su primera condecoración. Además, sus largos trayectos en motocicleta empezaban a revelar su carácter aventurero. En Pyin Oo Lwin entró en contacto con un regimiento escocés y empezó a enamorarse de las gaitas.
En el año 1936 se retiró del ejército británico. Sin embargo, su vida no dejó de ser llamativa y, por qué no admitirlo, algo estrafalaria: estuvo trabajando como editor de un periódico en Nairobi, desarrolló sus habilidades con la gaita (quedó segundo en una competición militar de gaita) y en el tiro con arco (participó en el campeonato mundial de esta disciplina en 1939 en Oslo), trabajó como modelo y actuó en la película A Yank at Oxford en 1938 (ya había actuado en The Thief of Bagdad de 1924).
Con todo este recorrido y actividades fuera de lo común, su peculiar trayectoria no había hecho más que empezar. La invasión de Polonia en 1939 por parte de la Alemania nazi hizo que el “loco Jack” se volviese a alistar en el ejército, siendo asignado al regimiento de Manchester y enviado a Francia como parte de la BEF (British Expeditionary Force). La Segunda Guerra Mundial había llegado de forma implacable y “Fighting Jack Churchill” no podía eludir su tarea. En L’Épinette emboscaron a una patrulla alemana y se cuenta que en la acción abatió a un alemán lanzando con su arco una mortal flecha que atravesó audaz y decididamente treinta yardas hasta impactar en el enemigo. No obstante, esto tiene más de leyenda que de verdad, pues el propio Jack declaró tiempo después que su arco se había roto antes del suceso. Lo que sí hizo fue levantar su poderoso y característico claymore para dar la señal de ataque. Así es, el “loco Jack” portaba una espada. Arco y espada en la guerra moderna.
Posteriormente, combatió en la batalla de Dunkerque y, no satisfecho con los servicios prestados, se presentó voluntario para los British Commandos. Pasó su entrenamiento en Escocia, donde conoció a su futura esposa Rosamund Denny. Poco después, fue uno de los comandantes de un asalto contra un regimiento alemán en Vågsøy, Noruega. Se dice que iba entonando March of the Cameron Men con su gaita antes de lanzar una granada y cargar contra el enemigo.
En julio de 1943, en el marco de la invasión Aliada de Italia, a Jack Churchill se le encargó la misión de capturar un puesto de observación nazi en Salerno. El temerario Jack se infiltró en la ciudad y cumplió la misión apresando a 42 enemigos. En 1944 fue enviado a Yugoslavia, llevando a su comando a la isla de Vis, donde apoyó a los partisanos de Tito y atacó la isla de Brač en junio con un ejército de comandos ingleses y partisanos yugoslavos para liberarla de la ocupación alemana.
En Yugoslavia existían dos movimientos de resistencia rivales. Por un lado, los Chetniks, nacionalistas, conservadores y monárquicos, liderados por Draža Mihajlović. Por otro lado, el Ejército Popular de Liberación y Destacamentos Partisanos de Yugoslavia, comunistas, con su comandante en jefe Josip Broz, «Tito». En un principio, los ingleses apoyaron a los Chetniks, pero en el 1943 los apoyos se centraron en Tito.
A pesar de que Brač fue liberada en julio, Jack Churchill fue capturado, interrogado en Berlín y confinado en el campo de concentración de Sachsenhausen. El “loco Jack” no podía permitir su cautiverio, así que se fugó pero lo volvieron a capturar en su ruta de huida, cuando ya estaba cerca de la costa del Báltico. Al volver al campo lo encarcelaron en solitario y lo encadenaron al suelo. Los alemanes empezaron a trasladar hacia el sur a los prisioneros de guerra cuando se estaba acercando el final de la guerra. En abril de 1945, Jack volvió a aprovechar la ocasión para escapar y lo consiguió cerca del paso del Brennero. Encontró un convoy estadounidense y se unió.
A “Fighting Jack Churchill” aún le quedaban fuerzas en su vigorosa actitud para seguir combatiendo. En el mismo año 1945 volvió a ser enviado a Birmania en el contexto de la llamada Campaña de Birmania de los Aliados contra los japoneses. No obstante, la guerra no tardó en acabar cuando Churchill todavía estaba en la India.
Después de la Guerra, “Mad Jack” se formó como paracaidista y fue enviado al todavía Mandato británico de Palestina comandando un batallón de la brigada paracaidista. Después trabajó como instructor y se dedicó al surf. Finalmente, se retiró del ejército en el año 1959 y falleció en el 1996 en Surrey. Su vida es un trepidante recorrido que muestra episodios fascinantes y candentes de la historia bélica del siglo XX. Fue un combatiente incansable, un trepidante aventurero, un excéntrico personaje, un loco…
Bibliografía
Churchill, Th. B. L. (2016). The Churchill Chronicles. Kindle Edition.