En 1985, el director Robert Zemeckis nos sorprendía con una comedia de ciencia ficción que se acabaría convirtiendo en uno de los iconos más reconocibles del séptimo arte y de los años 80. Su magia y su impacto en la cultura popular ha conseguido que todavía hoy perdure en el imaginario colectivo, aún después de las décadas transcurridas.

Viajes en el tiempo
Icónicos personajes como el joven Marty McFly (Michael J. Fox) o el excéntrico científico Doc Brown (Christopher Lloyd) quedaron grabados por siempre en la memoria del público, además de su magnífica banda sonora. Pero quizás el elemento más característico e insustituible de este film, sea el mítico automóvil DeLorean, convertido en una peculiar máquina del tiempo para la ocasión.
A lo largo de tres películas y a través de una serie de accidentados viajes en el espacio-tiempo, nuestros protagonistas se ven envueltos en todo tipo de aventuras hilarantes de las que deberán salir lo más indemnes posible. Porque atreverse a jugar con el tiempo, tiene sus consecuencias y no siempre halagüeñas. Muchos autores y cineastas del género nos trataron de advertir de los peligros que entrañarían estos aparentemente inofensivos «paseos».
Situaciones como la paradoja del abuelo o la paradoja de Hitler nos alertan de como viajar al pasado podría conducirnos de hecho a un bucle eterno sin fin. Otros científicos de la talla de Albert Einstein plantearon otras posibilidades como la paradoja de los gemelos. Según esta teoría, la medida del tiempo no es absoluta, puesto que la diferente medida de tiempos depende del estado de movimiento relativo. Algo que se ha demostrado en vuelos comerciales mediante relojes subatómicos.

Curiosidades
La saga «Regreso al futuro» ha logrado conquistar a millones de fans a lo largo y ancho del mundo a pesar del paso del tiempo. Pero, ¿de dónde surgió la idea? Al encontrarse con el anuario de su padre, el guionista Bob Gale se preguntó a sí mismo si él hubiera sido amigo de su padre de haber podido coincidir de adolescentes. Así fue como comenzó todo. Pero hay mucho más.
En una época en la que los trailers de una película dejan muy poco a la imaginación de los aficionados, el primero que promocionaba «Regreso al futuro» meses antes de su estreno en julio de 1985, no daba apenas información, sino que constituía un elemento mucho más conceptual. Esto era una práctica muy común en los años 80 y que trataba de mantener el misterio y enganchar al público.
Quizás no todos sepan que el papel protagonista en un principio no recayó sobre Michael J. Fox, sino sobre Eric Stolz, quien llegó a rodar varias escenas antes de su sustitución. A pesar de la buena interpretación de Stolz, ésta no terminaba de encajar del todo con la visión del director. Imaginemos por un momento cuan de diferente hubiera sido todo sin nuestro querido y apuesto Michael J. Fox. El resto es historia.
Curiosamente, también podríamos habernos quedado sin Christopher Lloyd en el papel de Emmett «Doc» Brown. Cuando se le ofreció el papel y tras leer el guión, Lloyd lo arrojó a la basura ya que no lo terminaba de entender y en aquel entonces prefería enfocarse en el teatro. Fue su mujer la que le convenció de que no debía desaprovechar ninguna oportunidad y fue entonces cuando Lloyd decidió darle otra oportunidad. Menos mal.
Así mismo, la increíble máquina del tiempo presente en toda la saga en principio no iba a ser el legendario DeLorean sino un… ¡refrigerador! Como lo leen. Pero por cuestiones de seguridad, ya que los niños se podían haber metido dentro de las neveras y haber causado accidentes, se determinó cambiar de idea. Lo que a la postre, resultó ser de lo más acertado, dados los resultados. Pero estos no fueron los únicos detalles que se cambiaron, por suerte.
La famosa película que todos conocemos y que posteriormente daría lugar a una extensa trilogía, no iba a titularse originalmente «Regreso al futuro» (Back to the future, en inglés) sino El Hombre del Espacio de Plutón. Un título que, en opinión de muchos, no hubiese resultado nada prometedor. Por fortuna, el productor Steven Spielberg lo rechazó de plano. Quien sabe de qué manera hubiese acabado esta saga inmortal de no haberse tenido en cuenta todas estas apreciaciones.
«Un momento Doc, ¿de qué estás hablando? ¿Qué nos ocurre en el futuro? ¿Nos volvemos gilipoll** o algo parecido?» […]
«Ehh Doc, no hay bastante carretera para alcanzar los 140 kilómetros por hora»
«¿Carretera? Adonde vamos no necesitamos carreteras»
Como última curiosidad, este emblemático diálogo entre Marty y Doc justo cuando el DeLorean se transforma en un coche volador, era de hecho una broma final. No se esperaba ninguna continuación. Pero debido al éxito cosechado de la primera película, este chiste se terminó convirtiendo en un elemento que impactaría de lleno en las dos siguientes, especialmente en la segunda, donde se viaja a un hipotético año 2015. Esperemos que la pasión por los icónicos años 80 nunca se pierda.
«¡Nadie me llama gallina!»
Marty McFly

Bibliografía
Antena3Noticias. «Seis curiosidades de ‘Regreso al Futuro’ que desconocías». https://www.antena3.com/noticias/cultura/seis-curiosidades-regreso-futuro-que-desconocias_20231021653362c2a1cbe00001760cfe.html
Pozo, J. C. (2020). «Las mejores y más sorprendentes curiosidades de Regreso al Futuro que todavía muchos desconocen». HobbyConsolas. https://www.hobbyconsolas.com/reportajes/curiosidades-regreso-futuro-613547
Schneider, S. J., ed. (2003).1001 películas que hay que ver antes de morir. Grijalbo.
Torres, R. (2025). «La máquina del tiempo inicial de ‘Regreso al futuro’ no era el famoso DeLorean». Eldebate.